Electrodomésticos y utensilios de cocina: horno, estufa, cuchillo, tabla de cortar, tazón, sartén, rallador, espátula, tenedor, plato, tazón, fuente para horno.
Los ingredientes
Producto | Cantidad |
Hígado de pollo | 700-800 g |
Cebollas | 1 pc |
Queso duro | 100 g |
Sal | al gusto |
Pimienta negra molida | al gusto |
Crema agria | 3-4 cucharadas l |
Harina (para empanar) | 0.5 pila |
Aceite vegetal (para freír) | 50 g |
Paso de cocción
- Primero preparamos todos los productos. Lavamos bien el hígado (700-800 g), eliminamos todo lo superfluo, lo cortamos en pequeñas porciones y lo colocamos en un tazón.
- Agregamos sal al hígado, agregamos pimienta negra molida al gusto. Lo dejamos a un lado por ahora, dejemos que se sala. Y vamos a cortar las cebollas.
- Limpiamos una cebolla grande, la lavamos y la cortamos en cuartos.
- Queso duro (100 g) tres en un rallador grueso.
- Todos los productos están preparados. Puedes empezar a freír. En una sartén, caliente 50 g de aceite vegetal. Vierte medio vaso de harina en un tazón pequeño. Los trozos de hígado se empanan en harina y en pequeños lotes freímos el hígado hasta que estén dorados por ambos lados. El hígado se está cocinando muy rápido. Es suficiente freírlo literalmente durante 1 minuto en cada lado. Retira el hígado frito en un plato con una espátula y un tenedor y fríe la siguiente porción.
- Cuando freímos el último lote de hígado, freímos las cebollas en el mismo aceite. Las cebollas no se deben freír demasiado, sino solo un poco estofado.
- Agregue cebolla frita al hígado. Aquí agregamos 3-4 cucharadas de crema agria. Mezcle todo con cuidado para que las piezas del hígado no se rompan.
- Cambiamos el hígado a una fuente para horno. Si el molde es antiadherente, no necesita lubricación. Si la forma es normal, antes de extender el hígado, debe lubricarse con aceite vegetal.
- Espolvorea el hígado con queso rallado y envíalo al horno, precalentado a 180 grados, durante 10-15 minutos. El queso debe derretirse y se debe formar una corteza dorada.
- Tan pronto como el queso se derrita y esté ligeramente dorado, el plato estará listo. Puedes servirlo en la mesa.
Formas de decorar y servir
Las salsas se pueden servir con hígado al horno. Por ejemplo, la salsa de pesto es buena. No es necesario buscarlo en las tiendas, pero puede cocinarlo usted mismo. Está hecho de hojas de albahaca, queso parmesano, ajo, nueces (mejor que el cedro) y aceite de oliva, batido en una licuadora hasta obtener una consistencia bastante áspera y no en estado puro.
Además, una salsa ligera de zaziki, que se prepara a partir de piel de pepino rallada y pelada, eneldo finamente picado y perejil, varios dientes de ajo pasados por una prensa, es muy adecuada para el hígado. El aderezo está hecho de yogur sin azúcar bajo en grasa, jugo de limón con especias y aceite vegetal.
Video receta
Este video muestra por etapas cómo hornear un hígado debajo de una corteza de queso, comenzando con la fase preparatoria.